DíA cINCO

Escritura:

Yo soy el Señor , Dios de toda la humanidad. ¿Hay algo imposible para mí?

Jeremías 32:27

Comentario:
Dios hace esta pregunta, no porque Él dude, sino para recordarnos que nosotros tenemos límites. Pero Él no. Estas palabras fueron dichas en un momento en que todo parecía imposible. Sin embargo, Dios le recuerda a Su pueblo quién es Él: el Dios de toda carne. Lo que para nosotros es difícil, para Él no lo es en absoluto. La oración desesperada comienza aquí: llevando lo imposible al único que puede hacerlo posible. Al orar, recuerda siempre con quién estás hablando.

Práctica:
Antes de pedir algo hoy, detente un momento y recuerda quién es Dios. Decláralo en voz alta: “Tú eres el Señor. Nada es imposible para Ti.” Deja que esta verdad transforme la manera en que oras y lo que con valentía pones en Sus manos.

Oración Guiada:

Padre Celestial,
Recuérdame hoy Tu poder.
Ninguna circunstancia es demasiado grande para Ti,
y ningún detalle de mi vida es demasiado pequeño para Ti.
Te importa lo más importante
y también lo más sencillo.
Hoy pongo delante de Ti todas mis cargas
y las preocupaciones que me agobian.
Recuérdame Tu poder

y Tus buenos planes para mí.
Haz lo que solo Tú puedes hacer
y enséñame a esperar en Tu obrar.
No dejaré que la duda ni el temor
gobiernen mi corazón.
Confío plenamente en Ti.
Guíame por estos valles
hasta llegar a Tu presencia.

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